Hace unas semanas leí una noticia sobre la existencia de una cata de carnes que iba a tener lugar en el restaurante madrileño Kabuki Wellington. Me llamó la atención ya que un evento de estas características no se había organizado hasta el momento, en territorio nacional.
El Buey del Valle del Esla se enfrentaba con dos grandes pesados dentro de las mejores carnes rojas a nivel internacional: la carne Wagyu procedente de Nueva Zelanda (Oceanía) y la carne de Angus de origen americano.
Pues, el pasado miércoles día 19 de noviembre, tuvo lugar en el citado restaurante, el evento que os comentaba. Uno de los eventos gastronómicos más interesantes y únicos de la temporada. Un encuentro en el que se dieron cita más de 50 profesionales del sector gastronómico para catar las tres mejores carnes de vacuno del mundo.
Las carnes se presentaron en tres modos diferentes de cocinado: en crudo, en tataki (cocinado por fuera y sumergido en agua con hielo para cerrar los poros) y a la plancha.
Los resultados de esta cata han revelado que no existen diferencias significativas entre las tres carnes evaluadas y que Valles del Esla está a la altura de las mejores carnes del mundo.
La carne de buey de Valles del Esla destaca en aroma y sabor tanto preparada en crudo como en tataki. En el aspecto, en el cocinado en plancha ha obtenido el mejor resultado de las tres carnes. Waygu supera ligeramente en jugosidad y terneza tanto a Angus como a Valles del Esla, si bien estas dos últimas están muy igualadas en la mayoría de los parámetros medidos, siendo Valles del Esla más valorada que Angus en las modalidades de crudo y plancha, tanto en aspecto como en aroma y en jugosidad.
La cata ciega fue dirigida por el equipo de la empresa de investigación alimentaria AZTI – Tecnalia, quien se encargó de supervisar las muestras, de su codificación anónima, y de explicar a los asistentes la forma de cumplimentar las fichas de cata para el posterior tratamiento de los datos y la elaboración de un informe completo que nos ha ayudado a conocer la opinión de los expertos. Los parámetros que se midieron fueron: aspecto, aroma, sabor, jugosidad y terneza.

1_Ricardo Sanz con una de las elaboraciones. 2_Asistentes a la cata. 3_Los tres tipos de elaboración
El prestigioso chef del citado restaurante, Ricardo Sanz, fue el encargado de elaborar los platos en sus diferentes modalidades. El panel de cata estuvo constituido por una treintena de periodistas gastronómicos, por profesionales del sector cárnico, por especialistas en gastronomía y por un reducido grupo de aficionados a la carne de calidad.
La Cata de los Tres Continentes nos ha servido para demostrar, que si bien cada una de las tres carnes catadas tiene sus peculiaridades propias, Valles del Esla está al nivel de las mejores carnes del mundo.
Pues ya era hora de hacer justicia a la que creo que es la mejor carne española y un proyecto empresarial único que merece la pena apoyar. Eso sin menospreciar lo mas mínimo la calidad de esas magníficas carnes asiáticas y americanas. pero es que el papanatismo de los españoles a veces es para risa.
Pero es que con Valles del Esla me basta con llamar por teléfono y al día siguiente tengo el pedido en casa para todo el mes, el consumo de mi familia, el de mi cuñada y la chica que nos ayuda con el servicio doméstico. Una eficacia impresionante en el servicio y la forma de aconsejar como conformar el pedido.
Por cierto. ¿Habéis visto la web http://www.vallesdelesla.com ? Ofrecen una información complet´simo, para aburrir…. Probé el cordero churro que tienen y eso es otro nivel. Lo último que están haciendo son capones, lo he pedido para Navidad, pero no se si ya lo tienen agotado.
Es una pena que se divulgue la maravillosa carne del Esla. pasará como el jamon ibérico, se la llevarán toda al extranjero.
Antes cunado le dabas carne del Valle del Esla a tus amigos los podías sorprender, ahora ya saben distinguirla. Y si encima se enteran de que te la llevan a casa ya la coas se pone peor. Nos quedamos sin lo nuestro. Yo espero que sigamos sin divulgar la maravilla que supone tener capones y la raza churra autenticos.