Hoy estamos de aniversario, seis años hace ya desde que el Grupo enogastronómico TETRA se conoció. Y como en todo cumpleaños hay un brindis, y en esta ocasión las burbujas de Perrier Jouët han sido nuestras protagonistas.
¡Un vino que será recordado por todos nosotros!
La casa Perrier-Jouët, con dos siglos de historia, se distingue por el uso de una importante proporción de chardonnay, procedente de las mejores laderas de la Côte des Blancs.
La historia de la Casa Perrier-Jouët está íntimamente vinculada con el Art Nouveau de la Belle Époque, así, el emblema de la casa es la botella de Cuvée Belle Époque inspirada en un frasco del maestro vidriero Émile Gallé en 1902, a petición de la Casa.
En 1990, esta bodega inauguró una mansión maravillosamente decorada por los artistas más prestigiosos del Art Nouveau (Majorelle, Gallé, Daum, Guimard, Lalique o Rodin), donde acoge a sus huéspedes con gran hospitalidad. La mansión cobija la primera colección privada de mobiliario y de objetos de arte de la Belle Époque.
Champagne Perrier-Jouët Blason Rosé
Perrier-Jouët Blason Rosé es un 75% de uvas tintas, 2/3 de las cuales es pinot noir. Lo demás es pinot meunier y Chardonnay.
Un champán madurado en galerías abovedadas, directamente cavadas en la caliza, en tres niveles y con un total de casi diez kilómetros y a 15 m. de profundidad.
- Tonalidad naranja suave muy apagada, con una gran cantidad de muy finas burbujas.
- La Nariz con aromas limpios e intensos que proceden del tiempo en rima, de los meses en contacto con las levaduras. Los primeros aromas que destacan son a bollería, tipo Brioche. Con el tiempo van cambiando y me recuerdan precisamente a un pastel de navidad típico de Alemania y países anglosajones con pasas, canela, grosella y guindas, con una masa tipo brioche.
- Es un champán que una vez pasado el tiempo, más o menos 40 minutos, curiosamente vienen recuerdos a flores blancas, a rosas (me recuerda al perfume de Clhoe).
- Entrada en boca es fresca, con personalidad. El paso en boca es largo al principio aunque he de decir que decae con el tiempo. Con una burbuja fina muy integrada en el vino y aguanta hasta el final. Recuerdos al brioche, a ese pastel con pasas navideño, incluso algo de Kirsch. La persistencia es media-baja. A mi parecer es un champán que en boca me resulta más ligero de lo que me esperaba. La nariz tiene un cambio de registro aromático, sin embargo en boca es ligero y de baja persistencia.
- Champán que tomaría como copa de bienvenida, copa de cóctel será fenomenal.
PVP aprox: 47 €
¡Muchas felicidades TETRA! ¡Vamos a por el séptimo!
